✓ Para comunicarse, coordinarse, colaborar, mejorar la propia práctica docente y garantizar la seguridad, privacidad y el bienestar digital del alumnado.
✓ Para encontrar, crear y adaptar contenidos digitales educativos.
✓ Para mejorar la propia práctica educativa, en definitiva, los procesos de enseñanza y aprendizaje.
✓ Para asegurar una mejor la evaluación del alumnado, tanto del proceso como del aprendizaje.
✓ Para garantizar un compromiso activo del alumnado en su propio aprendizaje.
✓ Para capacitar al alumnado en el uso, creativo y responsable de la tecnología.